Casi, casi...

Después de menos de dos semanas de arduo trabajo, ya se encuentra el habitáculo terminado y listo para ser “amueblado” e instalado.

Sinceramente, impresiona ver el resultado y la amplitud con la que cuento para “trabajar” en mi acuario. No obstante, repasando momentáneamente sobre el suelo las medidas de cada aparato que va instalado, puede incluso resultar pequeño ahora que lo veo más detenidamente.

Cada vez se ve más cerca la finalización de mi proyecto y aunque, he tenido que sufrir algún que otro imprevisto como la demora de mi pedido en EEUU con Marine Depot, debida primeramente, a la lentitud del proceso bancario en las transferencias internacionales y en segundo lugar a la pérdida de uno de los paquetes en España, merece la pena haber pasado esos aprietos con tal de experimentar estas sensaciones…

Ahora queda la labor de instalar toda la parte hidráulica y eléctrica del conjunto, así como montar el tanque principal in-situ.

Nunca había imaginado semejante "mole" de tanque para ser destinado a convertirse en mi gran VENTANA A UN MUNDO DE CORAL...